La Paz está Contigo. “Y con los Míos también” debe haber contestado Víctor
Acha al Padre Celestial en el momento de
ingresar a la Casa Común. Porque a pesar de los dolores corporales del
accidente su alma debe haber tenido mucha paz,
la paz de 52 años distribuyendo el manjar del Cielo a todo aquel
que compartiera la ruta de la vida, mediante su apostolado
jesucrístico al lado siempre de aquellos
a quienes vino a buscar el Señor, que también sintieron esa misma paz como legado de Víctor al
enterarse de su partida.
Hay dos aristas en la vida sacerdotal del Padre Acha por la cuales su
ministerio ha sido tan fructífero, conocido y apreciado en la Iglesia. El
Víctor Acha precursor de la nueva catequesis en la Diócesis por un parte; y por
la otra, su vida de entrega en apostolado al lado de los pobres y marginados
que casi le costó la vida.
Para conocer mas profundamente su labor en el campo de la catequesis, les
presentamos una semblanza pergeñada por el Pbro. Francisco Bisio, párroco de
Barrio San Vicente, en Córdoba, MAESTRO DE CATEQUISTAS quién compartió por
mas de 20 años esa labor con el Padre Acha.
Y para recordar los “efectos colaterales” que tenía en las décadas del 60 y
70 trabajar con los pobres y marginados, hemos conversado con Vitín Baronetto
que con su generosidad y compromiso de
siempre, nos autorizó a publicar un artículo de su autoría ya editado en otros
medios VICTOR ACHA, HASTA LA VICTORIA,
pero que debido a la precisión narrativa y la transparencia fraternal
que conlleva, nos pareció oportuno reproducir aquí.
También ofrecemos a nuestros lectores el último escrito del Padre Víctor
Acha, que versa sobre la pandemia VOLVER A LA NORMALIDAD. Y una “charla” del
propio Víctor con alumnos de su parroquia en Carlos Paz que éstos
transcribieron y publicaron EL PERDÓN ME AYUDÓ A SOBREVIVIR.
De esta forma ponemos a consideración de nuestros seguidores en todo el
país –porque en Córdoba es harto conocida- la vida y obra de un sacerdote que fue modelo de entrega al pueblo de Dios
en la opción preferencial por los pobres.
Finalmente, aquellas palabras certeras de Mons. Jorge Novak, primer Obispo
de la Diócesis de Quilmes: “Sin el Espíritu Santo nuestro servicio a los pobres
no pasaría de ser una acción humana muy limitada. Hasta podríamos caer en el
peligro del fariseísmo, de la simulación o de la vanidad. Cuando nos anima el
espíritu de Cristo, la opción preferencial por los pobres entraña un servicio
que llega hasta el martirio en caso de ser necesario”. Y éste ha sido el fundamento del sacerdocio
del Padre Víctor Acha. Por eso Buenas y
Santas ha querido compartirlo con todas las personas de buena voluntad a lo
largo y ancho del país.
Eduardo Gobbi

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